
“Las leyes del equilibrio” es su segundo disco en solitario. Un disco donde según él cada canción es un capítulo de una novela, un disco narrativo. El protagonismo es en torno a Manuel, cuya historia empieza con una ruptura sentimental y continúa con situaciones llenas de dramatismo. La instrumentación está llena de texturas y matices. Ambientes evocadores, huyendo del patrón rock, marcan el ritmo de este buen disco en el que hay que prestar atención a sus letras. Perfecto para escuchar en el salón de casa con un buen whisky envejecido como compañía.
Anoche lo estuve viendo en directo en el Monasterio de La
Cartuja, dentro del ciclo Nocturama. Afinando constantemente
su guitarra y desgañitándose al final. Acompañado de banda dio un buen concierto
aunque a mí no me gustó mucho excepto en momentos puntuales. Me gustó más en la intimidad del Fun
Club hace años presentando este disco. Estaba él sólo en el escenario y con la
ayuda de un auto-loop se bastó y se sobró para emocionar a los que estuvimos
allí aquella noche. Grato recuerdo conservo de aquel concierto. La noche de
ayer me la salvó la compañía y la cerveza.